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Obama y el cuarto poder: un punto de inflexión.

  • Nuevo chico en el bloque.

Mucho se ha comentado en los últimos meses sobre la utilización de la tecnología por parte de Barack H. Obama en su camino a la Casa Blanca, y, seguramente seguiremos comentando mucho tiempo más sobre ello ya que solo llevamos 100 días de su presidencia, pero sobre todo porque, desde varios puntos de vista, la utilización que hizo de todas las tecnologías a su alcance demuestra que podemos estar ante un cambio muy importante en varios frentes, y en gran parte debido a la tecnología.   Estos frentes, si pudiéramos llamarlos así, serían los siguientes:

  1. La comunicación de un gobierno con sus ciudadanos,
  2. La nueva relación con la prensa tradicional, y
  3. La reformulación en el equilibrio de las relaciones entre la opinión pública, la prensa y el gobierno en gestión.

Estos tres ejes, vistos desde la perspectiva del nuevo ocupante de la Casa Blanca, creo que la mayoría de sus oponentes políticos recién se dio cuenta hace unos días de que existían como estrategia, y que todavía no han podido recuperarse del efecto devastador que tuvieron en la campaña de la elección:  Obama vapuleó a McCain, y ahora continúa sorprendiendo y ganándole de mano a todos a su alrededor de manera sistemática, innovadora y con un fuertísimo elemento tecnológico en todo momento.

Existe una anécdota sobre los primeros días de la gestión del nuevo presidente y su equipo, la cual puede reflejar de alguna manera las diferencias abismales y el contraste entre los estilos de Bush y Obama.  Se comenta que al tomar posesión de la Casa Blanca en enero de este año, el «equipo de transición» de Obama encontró los sistemas telefónicos, o sea, la central telefónica, el cableado de datos, las computadoras, pero particularmente la red de telefonía de toda la Casa Blanca, uno de los sitios mas importantes del mundo, en un estado casi obsoleto, inclusive con internos importantes de oficinas importantes que no habían funcionado en mucho tiempo.   En la edad de la convergencia de las telecomunicaciones, el nuevo presidente, conocido por un don particular de llamar personalmente por teléfono por temas importantes y de efectuar al menos 20 llamados diarios,  debería dejar su famosa BlackBerry, debería modificar sus hábitos y utilizar todos los medios electrónicos que estaba acostumbrado a utilizar libremente en concordancia con los protocolos de seguridad más exigentes, y también debería acostumbrarse a utilizar lo que algunos de sus colaboradores recalcaron sobre las instalaciones existentes al mencionar que parecían salidos de la Edad Media («Dark Ages»).

Sabemos que la BlackBerry la retuvo, aunque un modelo especial que no permite muchas de las funcionalidades habituales, por temas de seguridad obvios (entre ellos el rastreo o la geo localización del dispositvo del mandatario en todo momento, lo cual es evidente que presenta un problema de seguridad), sabemos que el sitio nuevo Web de la Casa Blanca haría sonrojar a varias multinacionales que supuestamente gastan millones en el tema,  (para todos aquellos que no lo han visto, se los recomiendo, vale la pena, más allá de creencias políticas y de cuantas veces haya leído «Las Venas Abiertas de América Latina» : http://www.whitehouse.gov/ ), y también sabemos que no ha tenido problemas al hacer sus llamadas diarias desde que asumió.  Algo ya ha cambiado y mientras tanto, los republicanos se preguntan como reaccionar.

  • El dueño de la pelota.

La comunicación de un gobierno con sus ciudadanos.

Cabe mencionar que, más allá de que es un presidente muy tecnológico,  que utiliza todas las tecnologías disponibles, muy apoyados en Internet,  lo que me resulta por demás llamativo es que lo que ha logrado es en cierta medida «puentear» a la prensa, asegurándose que, en todo momento, con toda comunicación del gobierno sobre su gestión, y con el énfasis necesario, el gobierno contará con sus propios medios para difundir la información.

Imaginemos por un instante cualquier político de alto rango: alcalde, gobernador, presidente, rey, el que sea.  E imaginemos que cada vez que ese político tenga que comunicar, no tenga que depender de la prensa, o que pueda de alguna manera, «ganarle de mano» a la prensa en la comunicación, sería algo así como tener a toda la población en Messenger, o incluso todos los celulares para enviar mensajes de texto.

Imaginemos que, a su vez, se cumple otra condición clave en esta nueva realidad: el político tiene una personalidad abierta o particularmente desarrollada para comunicar, que «tiene luz» como decimos algunos.

Y por ultimo, la mas importante, supongamos que el político, o el poder gobernante, quiere comunicar, o comunicarse con su pueblo.

Imaginamos todo esto y podemos decir que, en el caso de las elecciones del 2008 en EE.UU., se dieron esas condiciones, y que la combinación de esos factores, bien utilizados, puede haber jugado un rol importante en la elección. Ahora bien, si a ello le agregamos la comparación con la utilización de la tecnología que hizo su adversario, John McCain, es todavía más evidente: dos generaciones se encontraron en una carrera presidencial, y el uso de la tecnología por parte del ganador fue importante y se puede decir que fue decisivo en algún punto. Y si llevamos esto un paso más todavía, podemos decir, que al igual que en los términos generales de la sociedad hoy por hoy, el analfabeto digital está en neta desventaja.  No digo que Mc Cain sea un analfabeto, digital u otro, pero su utilización de los medios a su disposición en gran medida se redujo a la utilización masiva de los famosos «robocalls» donde una maquina emite el mismo mensaje por telefono.   Mientras tanto, su adversario llegaba por todos lados, SMS, Facebook, Twitter, aplicaciones móviles, todas las tecnologías a su alcance.

Es así que el gobierno puede disponer de sus propios medios para comunicarse de manera eficaz, participativa y muy rápida.  Esto, como vimos, no solo es invalorable por lo que representa en si, sino y sobre todo porque, a mi juicio, le permite al gobierno «puentear a la prensa», no depender de ella, a un costo muy inferior a lo que puede ser el imprimir un diario por ejemplo, y con una rapidez valiosísima.

  • El Cuarto Poder

La nueva relación con la prensa tradicional

Por otro lado, y teniendo en cuenta que estamos en un punto de inflexión, y sabiendo que si bien estamos asistiendo a una mutación de la prensa tal y cual se consagro con el titulo de «Cuarto Poder», está claro que el Presidente Obama debe mantener una relación buena y fluida con la prensa, y lo hace de una manera bastante impresionante.  Quizás a los ojos de muchos latinoamericanos, teniendo en cuenta la relación del poder con la prensa en nuestros respectivos países, y también, el algunos casos, por no estar del todo familiarizados con los protagonistas de la relación en EE.UU., la relación de Obama con la prensa puede resultar extraña, rara, casi exótica.

Si bien podemos decir que Internet, los Blogs y esta verdadera avalancha de información que nos “ha dado” la era de la información, es un movimiento sin precedentes desde todo punto de vista, también hay que decir que, por lo menos por ahora, la prensa tradicional americana, la televisión abierta y por cable, todavía forman parte de una ecuación que sigue vigente, si bien son vestigios de lo que originalmente podría llegar a llamarse el “Cuarto Poder” tal como lo conocíamos.

En este caso, vemos todos los días como Obama ha cautivado a su audiencia, como si fuera un actor en el primer acto de su obra maestra.  Están todos cautivados, («estamos», podría decir), por su forma de ser, su frescura, su inteligencia (nuevamente, el contraste entré el y su antecesor lo favorece), a tal punto que hasta el mismisimo Hugo Chavez se quiere sacar fotos con él e hizo lo imposible por figurar en la cumbre de la Américas, en la foto que luego trajo tantas criticas (al presidente Americano).   La prensa tradicional no está excluida de esta fascinación.   Los más críticos dirán que Obama vende, lo cual es cierto, pero lo esencial es que la fascinación de todos puede resumirse en que todavía no saben (no «sabemos»?) como reaccionar ante el torbellino Obama.  Es una avalancha constante de novedades, nuevos instrumentos, bastante humor, todo, a la par y siguiendo el ritmo de la vorágine informacional que vivimos.

Ahora bien, en su relación hasta ahora con la prensa tradicional, y desde el punto de vista del extranjero, que no conoce los protagonistas tan bien como seguramente los conocen en el «gran país del norte», lo curioso de la relación del presidente americano, en esta nueva relación, combina elementos de «lo nuevo» y «lo viejo», en una danza muy particular,  donde ambos se entremezclan.

El propósito de este post es discutir sobre un cambio que existe a partir de enero de este año, visto desde el punto de vista de la interacción nueva que se genera entre la sociedad y un actor central en la vida de todos como lo es el del gobierno, y en este caso en particular el de Obama, y la influencia o el rol que juega la tecnología en ello.  No es el propósito de este post entrar en discusiones grandilocuentes sobre la prensa y el gobierno.   Le dejo a los profesionales en la materia hablar de ello.

En esta línea de pensamiento,  y con esto en mente, veamos distintas ilustraciones de ello:

  1. El rol que pasa a jugar la Casa Blanca a la hora de difundir la información relativa a su gestión pasa a ser un eje central de la comunicación y por ende corta en seco la participación tradicional (o como la conocemos hasta ahora) de los medios a la hora de retransmitir,  e interpretar, la información.  Por ejemplo: si todos los ciudadanos pueden acceder por ejemplo a la información, de la misma forma que acceden a través de un portal de noticias, se elimina un intermediario que no siempre dice lo mismo que el gobierno quisiera resaltar.  Si miran hoy el sitio de la Casa Blanca, verán que es prácticamente un Blog, con sus links, con una actualización permanente envidiable para cualquier editor de medios, con sus links obligatorios a Facebook, Twitter, Flickr, MySpace, YouTube, etc.
  2. "Stay connected" dice Obama

    Ahora, pongamos este ultimo pensamiento en el contexto de nuestros queridos gobiernos latinoamericanos y empecemos a mirar lo que se hace en nuestros países (ahora sí que se pone interesante!).  Cuando el gobierno pasa a tener un medio de comunicación como la Web a su disposición y lo utiliza, la relación con la prensa tradicional cambia en su eje.  En el caso de Obama, y en el caso de las democracias mas estables y antiguas del viejo continente,  y Canadá, por ejemplo, hace tiempo que la Web forma parte de la gestión del gobierno, pero en el caso de Obama, el cambio es brutal porque se hace protagonista de su propio canal de comunicación y no es un simple elemento complementario más para evitar burocracia y poder imprimir documentos en PDF desde el sitio Web del gobierno.  Además de todo eso, se convierte en «vendedor» de su propia gestión, es interesante y entretenido, mucho más de lo que pueden seralgunos portales de noticias que vemos hoy.  Esto es un gran cambio y una gran ventaja.  ¿Como se puede llegar a aplicar en manos de uno de nuestros gobernantes en America Latina el mismo fenómeno?  Hmmmmm.  Cabe mencionar que, a mi humilde conocimiento, salvo por la excepción del gobierno de Chile hace ya varios años, los gobiernos de América Latina todavía no han despertado en esta materia, y tenemos todavía que padecer los ciudadanos sitios Web desactualizados, lentos, arcaicos en casi todos los sentidos.  Patético sería una expresión más acorde a la realidad.  Por favor, el que tenga buenos ejemplos de los sitios de gobierno que valen la pena, pasenlos.

  3. La transparencia y la responsabilidad pasan a ser un eje central.  Y, por supuesto, uno piensa inmediatamente que estos deberían ser verdaderos pilares fundamentales de cualquier gestión gubernamental, de cualquier relación en realidad, entre personas.  Pero, todos sabemos que eso esté lejos de ser la realidad.  Ahora bien, a la hora de gobernar, el hecho de que el gobierno disponga de sus medios de comunicación hacen que el mismo sea responsable, y que a la hora de proclamar la tan mentada transparencia, se le exija que así sea.  Acá entra en juego el concepto de la palabra que en ingles es «accountability» , que en algunos casos se traduce como «responsabilidad», pero que en realidad tiene connotaciones que la acercan más a lo que vendría a ser «responsabilización», lo cual lleva una connotación directa que implica que deberá «rendir cuentas».  Un curioso ejemplo de esto se dio hace escasos días cuando se detectó que en un párrafo del sitio de la Casa Blanca, que habla de la postura del  gobierno de Obama sobre la política de las Fuerzas Armadas a la hora de contratar homosexuales, (la famosa politica «Don’t ask, don’t tell» ), y que ha sido un tema central en la elección de Obama y entre la comunidad homosexual americana.  El párrafo que originalmente hablaba en términos duros y críticos sobre esa política instalada hace tiempo ya en las Fuerzas Armadas, había sido modificado, despues de haber sido publicado en el nuevo sitio Web, o sea: había sido modificado por alguien el equipo de la Administración del nuevo presidente, y su nueva versión hablaba en terminos más blandos sobre el tema.  Lo curioso es que el mundo «blogger», muy fuerte en EE.UU.,  detectó a través de programas que detectan los cambios en los sitios Webs o en los Blogs, el cambio, y procedió a criticar a la Administración Obama por ello.  La prensa «tradicional» inmediatamente se hizo eco y…..el sitio se cambió a su versión original.  O sea, en resumidas cuentas, la transparencia y la responsabilización, atributos fantásticos de esta nueva realidad  comunicacional, tambien obedecen a ciertos códigos y deben reunir ciertas condiciones, si no, no tienen sentido.  Pensemos una vez mas en esto, en el contexto de nuestros respectivos paises en America Latina y nuestras realidades empiezan a cambiar la fisionomía del fenomeno y su aplicación a nivel regional empieza a verse un poquito borrosa.  Hmmmmmm.   Para que vean como se reflejó este articulo, levantado por bloggers originalmente, en la prensa tradicional,  este es el link en el sitio de MSNBC, en el show de Rachel Maddow: «Nothing to see here» («No hay nada para ver acá») Tema aparte: les recomiendo el programa de Rachel Maddow, que pueden ver por Internet en su totalidad, desde el sitio web de la misma Msnbc.com, y que es fascinante a la hora de ver un análisis de la realidad politica y en general.  Fascinante.
  4. Ante el aporte de la tecnología en la comunicación, que en este caso se ve reflejado en el cambio de, o en la utilización adecuada de, un actor central como resulta ser el nuevo presidente de los EE.UU., y desde hace un tiempo ya, vemos como los medios tradicionales deben ajustarse y reinventarse para subsistir.   El reflejo más común de este cambio es, en todos los portales de los periódicos,  lograda con mayor o menor éxito desde el punto de vista técnico, es la posibilidad que tiene el lector de expresar su opinión.  Podemos ver distintos medios, y distingo especialmente en este caso lo que es la utilización de un portal de noticias por parte de un medio tradicional como CNN, como canal de noticias por cable, (¿único en su genero?), un canal abierto americano, y lo que son los períodicos más tradicionales de aquel país, como por ejemplo el New York Times, The Washington Post, The Wall Street Journal.   Cabe resaltar que un CNN y un New York Times provienen exactamente desde los lados opuestos del espectro de la «prensa tradicional» ahora, CNN siendo uno de los principales protagonistas ahora consagrado, proveniendo de la era de la información, y el New York Times uno de los mas antiguos y respetados medios escritos.  Pero ambos deben reinventarse.  Y, que curioso que, por ejemplo, a la hora de asumir el desafío de la digitalización total, o la «portalización de la información», CNN en Español tiró la toalla hace mucho, dedicándose exclusivamente a la television, mientras que CNN en inglés ha crecido y expenadido sus horizontes hacia la digitalización plena, con video, coberturas en vivo, etc., aunque quizás con algunas políticas llamativas que reflejen quizás un cierto miedo a perder audiencia de sus programas de televisión a manos de su portal Web o de las aplicaciones mobiles a las que se accede desde un teléfono con Internet.   El New York Times, ha realizado cambios importantes desde el punto de vista de la Web, aunque, hay que decirlo,  le falta un camino a la hora de incorporar video.  Pero, bueno, no deja de ser el New York Times, ¿no?
  • Analfabetos politicos
    Linda frase como para atraer la atención, ¿no?  Y si, hay que decirlo y mirar para adentro: Y nosotros, ¿que? ¿Somos analfabetos políticos?  ¿Que estamos haciendo en América Latina ?
    Vamos a estar viendo algunos ejemplos, a medida que surgen, de como usamos en America Latina esta tecnología en el orden político.  Quiero creer que existen buenos ejemplos en la materia, nuevamente: que van más alla de la utilización meramente burocrática de la Web para la gestión de un gobierno, pero la verdad es que los ejemplos que tengo en mi «lista rápida» no son muy buenos.   Solo como para que pensemos un poco, en la Argentina tenemos algunos politicos que utilizan Facebook, pero que todavía no saben realmente cual es la posibilidad que tienen, y terminan utilizándolo como una pancarta virtual de contenidos y discursos estáticos (y muuuy aburridos por cierto) de sus campañas políticas del momento.   ¿Cuantos usan YouTube?  ¿Cuantos usan Twitter?
    ¿Cuantos han definido una estrategia global que utiliza estas herramientas en el contexto de una verdadera y autentica política de comunicación, genuina desde todo punto de vista y no solamente como un ardid de Marketing Político?

Hay un largo y auspicioso camino por recorrer.